Bestiario Cristiano

Bestiario románico

El arte románico no pudo resistir la tentación de representar ese mundo fantástico y otorgarle un simbolismo. Lo monstruoso, lo exótico, pasaron a ser más real que lo cotidiano y fuentes literarias como "Liber monstrorum de diversis generibus" fueron apreciados por la exégesis de los santos padres.

Dragón en Roncesvalles

"En lo feo se alababa y encontraba mejor a Dios porque lo monstruoso era prueba de la perfección de la belleza terrestre, símbolo de una belleza mutable y no de la verdadera belleza. Lo feo hace sentir nostalgia del ideal divino..mostruos, leones feroces, centauros, bestias salvajes, semihumanas..".

León en Gredilla de Sedano:tenía diversos sigmificados, el algunas circunstancias representaba a San Marcos o Cristo Resucitado, en otro símbolo del mal o pecado.

Dragones entrelazados, serpiente alada con 4 patas, se identifica con el diablo.

Basilisco.Serpiente con cuerpo de gallo y cabeza en la cola. Simboliza el pecado

Los grifos, de origen mesopotámico y Egipto, animales mitológicos con cabeza de águila y cuerpo de león, se les considera guardianes del templo.

Grifos en Santa Catalina de Azcona

Grifo en el Monasterio de Irache

Capitel portada Iglesia Santa Mª de Agramunt SXIII.Lérida.Configuración de un elefante, símbolo de Cristo, llevando sobre sus espaldas los pecados de los hombres.

Sirenas simbolizando el pecado

Unicornio, caballo con cuerno en la frente, símbolo de pureza y virginidad, poco representado en el románico.

Capitel con Unicornio,Colegiata de San Isidoro de León

Capitel con centauros. San Claudio de Olivares. Zamora Símbolo de la tentación y del pecado

Capitel de Santo Domingo de Silos, famosas Arpías, simbolizando los placeres carnales

Pero  tambien hubo voces discordantes como San Bernardo que se preguntaba por la razón y utilidad de tales monstruosidades. Para el hombre del románico casi tan reales eran un león como un elefante,un grifo, un centauro, monstruos con cuerpo de asno, patas de león y pies de caballo!!
Y no solo en el bestiario, sino el mismo San Agustín en "La Ciudad de Dios", el doctor de la Iglesia comenta la existencia de hombres con un solo ojo en la frente, otros sin boca y de pigmeos enanos con una pierna.

Bestiario en Santa Mª de Sangüesa